Un sistema de transporte especialmente diseñado para la carga sobre el techo. Los portacargas están formados por dos robustos perfiles de aluminio arqueados y patas con cubiertas de plástico integrales.
Los pies se adaptan a las fijaciones preparadas en las aberturas de las puertas y el mecanismo de fijación está bien protegido. El montaje es sencillo y el portacargas queda sujeto con seguridad en el automóvil.
El portacargas posee ranuras en T para el montaje de accesorios.